Tiempo de realización: 50m
Qué ricos son los macarrones gratinados! Este plato triunfa entre adultos y niños, ya que es una alternativa sencilla pero sabrosa, ideal para comidas familiares.
Y si lo que buscas es un menú más especial, puedes servir una sabrosa ensalada César con pollo como entrante y un exquisito tiramisú de limón como postre para bajar la comida. Estas recetas de inspiración italiana te harán triunfar en la cocina.
No esperes más, prepara estos sabrosos macarrones y haz que todos en casa celebren tu idea. Verás lo bien que se ven!
Ingredientes
400 gr. de macarrones
1 cebolla
2 dientes de ajo
Media zanahoria
500 ml de tomate natural triturado
Media taza de leche o 250 ml de salsa bechamel
200 g de queso parmesano
Sal
Pimienta
Aceite de oliva
Receta del gratinado de macarronesEmpieza preparando la pasta, rellena una olla con abundante agua, añade sal al gusto y un chorrito de aceite de oliva y hierve a fuego alto. Cuando hierva, añadir la pasta y cocinar hasta que esté al dente revolviendo con frecuencia para que no se pegue. Una vez listo colar y reservar. Mientras hierve el agua y se hace la pasta, prepara la salsa de tus macarrones gratinados. Pelar y picar la cebolla en trozos pequeños, pelar la zanahoria y cortarla en cubos y también cortar el ajo en trozos pequeños. Reserva. Añadir aceite a una sartén y llevar a fuego lento, cuando esté caliente añadir la cebolla y dejar cocer durante 3 minutos. Luego agregue el ajo y la zanahoria, sal y pimienta y cocine hasta que la cebolla esté transparente. Cuando la cebolla esté en el punto deseado, añadir el tomate natural triturado, sal y pimienta y dejar que la salsa se cocine a fuego lento durante 20 minutos. Revuelva ocasionalmente durante la cocción y trate de ver si necesita retocar la sal o la pimienta. Encienda el horno a 200 ºC para que se precaliente. Una vez que la pasta y la salsa de tomate estén listas, mezclar ambos ingredientes. Para evitar que la pasta se se seque, se aconseja añadir media taza de leche a esta mezcla, removiendo bien y colocándola en una bandeja adecuada para el horno. Si busca un resultado más cremoso, después de colocar los macarrones en la bandeja, añada una capa de bechamel encima. Puede saltarse este paso si lo prefiere y servir esta pasta sola con la salsa de tomate. En cualquier caso, cubra con una capa generosa de queso parmesano. Introdúzcalo en el horno y déjelo asar durante 10 minutos o hasta que el queso se derrita y se dore. Saca tus macarrones gratinados del horno, déjalos reposar 5 minutos y luego sírvelos, ¡ya verás como todos se chupan los dedos!
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