Tiempo de realización: 25m Nº de comensales: 4
El panna cotta es uno de los postres italianos por excelencia, pero si quieres probarlo de una manera más original, esta receta de panna cotta de chocolate blanco no te dejará indiferente. Además de tener un sabor irresistible se puede combinar con un sinfín de acompañantes, desde una deliciosa compota de fresa hasta un poco de jarabe de chocolate o café y, lo que usted elija, le encantará!
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Ingredientes
350 ml. de nata para cocinar
180 ml. de leche
50 gr. de azúcar
150 gr. de chocolate blanco
4 hojas de gelatina
Compota de fresa
Frambuesas
Preparación de la panna cotta de chocolate blancoComienza colocando las cuatro hojas de gelatina en un recipiente con agua fría y déjalas durante diez minutos. Este paso tiene por objeto rehidratarlos. Aproveche este tiempo para preparar el chocolate blanco. Hay que cortarlo lo más pequeño posible, pero para hacerlo más fácil, hay que cortarlo primero y luego triturarlo en un mortero. A continuación, poner la crema, el azúcar y la leche en una olla a fuego pleno y cuando llegue a hervir, apagarla. Si la gelatina está lista, retírela del agua y aplástela con los dedos para liberar toda el agua. Tan pronto como esté, ponlo en la sartén y muévelo con una cuchara de madera para mezclar todo y derretir la gelatina. Transfiera el chocolate blanco a la olla y revuelva para que todo se integre. Dejar enfriar un poco y transferirlo a los moldes. Poner los moldes en la nevera y dejarlos durante al menos tres horas. Después de este tiempo, se puede poner la mermelada de fresa y las frambuesas encima, pero no olvide lavar antes. Su panna cotta de chocolate blanco está lista! Te encantará!
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