Tiempo de realización: 30m Nº de comensales: 4
La tarta de queso es uno de los postres más conocidos del mundo y se puede combinar con una gran cantidad de fruta que da lugar a diferentes tipos de tortas, como la tarta de queso con fresas o la tarta de queso con arándanos.
Gracias a su popularidad, este pastel se ha convertido, junto con el de zanahoria, los muffins de vainilla o las galletas de chocolate, en uno de los postres más fáciles de encontrar en cualquier tipo de cafetería, pero tenga en cuenta que estos postres son siempre más ricos y hechos en casa.
Así que, ¿quieres saber cómo puedes cocinar tu propio pastel de queso con fresas? Sigue los pasos de PostreDulce.com y verás lo fácil que es!
Ingredientes:
1 paquete de galletas MarÃa
80 gr. de mantequilla
1 cucharada de esencia de vainilla
500 gr. de queso crema
500 g de nata/»>crema de montar
80 gr. de azúcar
1 sobre de cuajada
1 sobre de gelatina
100 gr. de fresas
Preparar una tarta de queso con fresas Lo primero que vamos a hacer es preparar la base de la tarta. Para ello, coloque las galletas en un bol y mójelas lo más pequeñas que pueda. Tan pronto como los tenga listos, derrita la mantequilla en el microondas por un par de segundos y luego póngala en el tazón junto con las galletas. Mézclalo todo junto. Ponga la mezcla que acaba de preparar en el molde en el que va a hacer la torta y asegúrese de extender la masa por todo el molde y dejarla prensada. Esto hará que la base sea más fuerte y rica. Tan pronto como lo esté, ponga el molde en la nevera. Vamos a preparar la base de queso ahora. Tomar una olla y ponerla a fuego lento con la crema, el queso, la cuajada y el azúcar. Dejar cocer un máximo de dos minutos y mover para que la cuajada actúe. En cuanto veas que el queso empieza a derretirse, añade la gelatina y la esencia de vainilla a la olla y sigue moviéndote. Si su salsa ya es más densa, saque el molde del refrigerador, vierta la mezcla sobre la base de la galleta y cubra el pastel con una película transparente. Vuelve a poner el pastel en la nevera. Tiene que ser de unas tres horas para que sea sólido y pueda comerse fácilmente. Una vez transcurrido este tiempo, lavar las fresas, cortarlas y repartirlas con cuidado sobre la tarta. ¡Tu tarta de queso y fresa está lista! Si quieres, puedes acompañarlo con mermelada de fresa o nutella, pruébalo y verás lo delicioso que es!
¿Te gustó este postre?